Querido lector, odio que cuenten los pasados de los vampiros, me hacen llorar.
Bueno, ignora eso de ahí. Hoy le toca a Kou, el idol Mukami. Kou me parece muy interesante, ¿realmente no sabe desabrocharse los botones? Ahora podríamos hacer una batalla sobre que torpeza es más adorable, si esta o que Ore-sama no sepa atarse la corbata. Ay Ore-sama, como se te echa de menos...
Debería comentar el episodio. Kou, buscando tema, regala a Yui un precioso ramo de rosas (adivina quién quiere uno así). Como la inútil no le quiso dar nada a cambio, Kou se enfadó y fue a beber su sangre, cosa que iba a hacer con o sin regalo, ya te lo digo.
Y cuando duerme con él... que cosita ahí con su pesadilla. Yo soy la inútil con suerte esa y lo abrazo o lo despierto suavemente como poco. Más aún sabiendo por lo que pasó de pequeño.
Y, bueno, a ver si aparecen los Sakamaki y la espabilan un poco. Ya saldrán la semana que viene. El corazón se me a puesto contentito al ver que Subaru iba a salvarla (o eso parece). Creo que la ve un poco como a su madre.
Por cierto, ¿te has parado a mirar la escena de la escalera del opening? Puedes saber la personalidad de cada Sakamaki solo con esa imagen. Voy a analizarla. *Busca la imagen, que aún no la tiene*
Bien. Supongo que si le das puedes ampliarla, aunque la calidad no es muy buena...
Ignorando a Reiji, que es el que me cae "mejor", vamos a ver lo que dice la escena de cada uno:
Ayato: en lo más alto de la escalera, como el Ore-sama que es. A parte, tiene una pose de lo más guay, en plan 'aquí soy yo el que manda'. Se ve mejor en la imagen que no lo que yo explico, pero ya te haces una idea.
Kanato: como un niño pequeño, está sentado en la escalera abrazando a su Teddy.
Raito: apoyado en la baranda/pasamanos de la escalera en plan seductor, cogiendo el sombrero con la mano libre y con las piernas colocadas de manera despreocupada. El típico seductor que seduce, está muy sexy.
Subaru: me recuerda a mí misma cuando no quiero hacerme fotos. Pose simple e incómoda, tal y como me lo imagino yo frente a una cámara. Se ve que es un chico tímido que querrías que te diera duro contra el muro.
Shuu: como estaba de pie al lado de la mesa de billar, se ha cansado y se ha sentado al final de la escalera, no pienses que la iba a subir o algo. A Shu le da igual todo, así que no se preocupa de mirar a cámara, si consideramos esto como una foto familiar (oh, que bonito). También podríamos interpretar su baja posición con que se la suda el ser el rey de los vampiros, dicho bastamente.
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